Sección publicada en El Blog entre el 2011 y el 2012
EL SIENTOEXISTIR

NOMBRE COMÚN: Sientoexistir.

NOMBRE CIENTÍFICO: El Sientoexistir no tiene nombre científico porque cree que no se lo merece, simplemente. Le hemos insistido en que ellos eran una especie humana como cualquier otra, pero no ha habido manera.

CARACTERÍSTICAS: Esta especie se mueve por el mundo como pidiendo perdón por haber nacido, de ahí su nombre. Son, en general, seres pacíficos y afables cuya mayor característica es que jamás creen merecer nada de lo que tengan o consigan. Da igual si han descubierto la vacuna contra el sida, han sido los primeros en cruzar a nado el Atlántico o tienen siete carreras y quince doctorados: los Sientoexistir jamás tendrán mérito alguno en lo hecho y lo atribuirán al azar, la fortuna, los astros o a la ayuda de los demás. No es exactamente modestia sino que va más allá. Por ejemplo, en una reunión de humanos el Sientoexistir disfrutará de la compañía de otros pero procurará mantenerse lo más al margen posible y jamás se inmiscuirá en discusión alguna. O también se las arregla siempre para que no se celebre fiesta u homenaje en su honor y, en el caso de no poder evitarlo, siempre consigue desviar la atención del resto de especímenes hacia cualquier otra persona con cualquier excusa. Se conocen incluso algunos casos de Sientoexistir que, tras toda una vida planificándolo meticulosamente de una manera exquisita, han conseguido que no se hable de ellos, ni para bien ni para mal, durante su funeral. Tiene un mérito terrible, efectivamente.

TIPOS: No hay tipos diferentes de Sientoexistir. Ni tipos, ni graduación, ni atenuantes, ni agravantes, ni nada: todos son iguales. Todos son exactamente igual de retraídos, igual de tímidos, igual de educados, igual de maestros en evadirse de lugares y situaciones sin dejar rastro, y todos se mantienen en el mismo, ya no segundo, sino incluso sexto o séptimo plano. En todo caso se les podría dividir entre hombres y mujeres, rubios y morenos o franceses y españoles, pero no por otro tipo de cosas.

HÁBITAT: Como el Sientoexistir se encuentra exactamente igual de a disgusto en cualquier tipo de hábitat, pero como aunque lo sienta tiene que existir y tiene que estar en algún lugar, resulta que, a su modo, es una especie que se adapta tremendamente bien a cualquier tipo de medio. Mientras le dejen estar en paz y no le hagan el centro de los focos, se encontrará relativamente bien adaptado. Sintiendo, eso sí, que molesta y está allí de más, pero relativamente adaptado.

ALIMENTACIÓN: El Sientoexistir se alimenta de los silencios. Cuando, tras un duro día de sentirse como un bulto en casi todos los lugares y ambientes, se encuentra a solas consigo mismo en su guarida, se nutre de ese silencio en el que no tiene que estar disculpándose por disfrutar de aquello. Cierto es que el Sientoexistir nunca descansa del todo, porque, obviamente, tampoco cree merecer la guarida de la que disfruta, sea ésta una mansión del cagarse o una chabola infame, pero por lo menos cuando descansa puede relajarse. O eso se creía hasta ahora, porque estudios recientes podrían indicar que, incluso en la fase rem del sueño, el Sientoexistir podría reprocharse el estar teniendo esos sueños tan bonitos.

APAREAMIENTO: Al contrario de lo que podría parecer, el Sientoexistir no tiene grandes problemas en la reproducción. Si dependiera de él, evidentemente, la cosa sería un imposible, pero, por motivos que se desconocen, el Sientoexistir atrae de manera poderosa a ciertos tipos de humanos del sexo contrario, que son los que se encargan de dirigir las operaciones y llevar el asunto a buen puerto. El Sientoexistir sólo se deja llevar, se deja hacer y al final, por supuesto, pide perdón y se va con la sensación de no merecer la noche de sexo que acaba de tener. Son todo un caso, sí.

COMPATIBILIDADES: Los Sientoexistir son total y absolutamente compatibles con la mayoría de las especies humanas. Ni gustan ni disgustan hasta el extremo, pero el hecho de que, pase lo que pase, nunca molesten es un punto a su favor que, en un universo lleno de Pesaos, Yomás, Lameculos, Cuentachistes y demás especies dañinas, casi todo el mundo aprecia y valora.

INCOMPATIBILIDADES: Si hay un tipo de humano que no se puede acercar a un Sientoexistir ése es el Pamilosdébiles, un ser abyecto que se alimenta de la debilidad de los más flojos o inadaptados de su entorno. Cuando un Pamilosdébiles agarra a un Sientoexistir puede llegar a dejarle sin energía, pero, afortunadamente, el Pamilosdébiles no es tan valiente con otras especies humanas, que suelen defender al Sientoexistir aunque sólo sea por pura compasión y por odio contra los Pamilosdébiles.

CONCLUSIÓN: A veces dan ganas de agarrarle por los hombros, zarandearle y gritarle: “¡Despierta y valórate, coño!”; pero, teniendo en cuenta lo que hay por ahí, no deja de ser una especie entrañable y a proteger. Porque si esperamos que se proteja a sí misma…

LeandroAguirre@2011 (revisión 19/12/2013)

 

TODO FAUNA HUMANA 2

 

 

SECCIONES ACTIVAS

SECCIONES FINALIZADAS

OTROS