El tema es simple: un vuelo de la compañía Saudia tuvo que realizar el otro día un aterrizaje de emergencia porque... una mujer se había dejado olvidado en la terminal a su bebé.
En fin... Olvidarte el equipaje, bueno. Olvidarte la bolsa del duty-free, vale. Incluso olvidarte los donuts tiene un pase. Pero un bebé...
Pero es que además se da cuenta en pleno vuelo, es decir, mucho después de embarcar, guardar el equipaje de mano, sentarse, ponerse cómoda, despegar y volar durante unos cuantos minutos. Puede que incluso estuviese degustando ya un café o lo que sea.
No solemos galardonar con el Tonto’lculo de la Semana a la gente sólo por ser despistada, pero es que esto es más que un despiste. Que es tu hijo, mujer de dios. Que ni camina ni es autosuficiente ni nada, pobre.
Cuando el niño sea mayor que no se queje si desconfía de ella. Que dé gracias si le dirige la palabra. Y es que parece que un bebé no se entera de nada pero sí, sí que se entera y hay cosas que marcan para toda la vida. Ésta es una.