Pues hoy la historia va de una chica, Carmen Chamblee, que hizo esto:

¿Y por qué lo hizo? En el vídeo el dueño del vehículo explica que no tiene pajolera idea de quién es la chica, que no la ha visto en su vida, y que por supuesto tampoco tiene ni pajolera idea de por qué había quemado su coche. Y podéis pensar: miente; algo esconde y miente. Pero no, no miente.
Porque el vídeo también explica que la chica estaba en búsqueda y captura con una recompensa de 5.000$ para quien informara sobre su identidad, pero ya no está en busca y captura. Que ya la han pillado, vamos.
¿Y qué contó Carmen al respecto tras ser detenida? Pues simplemente que se había equivocado de coche, que pensaba que era el de su ex novio. Lo que se conoce como un descuido tonto sin importancia, técnicamente hablando.
Y es que hay cosas que uno se ha de asegurar bien antes de hacerlas. Porque una cosa es ir a la cárcel por quemar el coche de tu anterior pareja, que, mira, al menos entras en prisión con el gustazo de haberlo hecho en el cuerpo, y otra ir a la cárcel por quemar el coche de un pobre tipo por equivocación, que además de entrar en el trullo entras con una sensación de tonto’lculo que no te la quita ni el agua de Lourdes. Bueno, lo suponemos, porque jamás nos ha dado por incendiar el coche de nadie. Hasta ahora. Por el momento. A fecha de hoy. Hasta este día. Pero quién sabe qué depara el futuro, ¿verdad?