ENTREBESTIA CON...

 

Manuel Valls

 

 

 

02/04/2014

Oui?

¿Señor Manuel Valls?
Oui.

Soy un juntaletras que quería hacerle una entrebestia.
Pas de problème.

Presupongo que, con ese nombre, habla español y hasta catalán.
Oui. Y francés.

Ya, claro. Es que ser llegar a ser primer ministro de Francia sin saber francés tiene que ser complicado.
Ustedes tienen un presidente que a duras penas habla español.

Eso es cierto. Ante todo enhorabuena.
Merci.

Época complicada...
Sí. Pero no hay miedo.

Se le conoce a usted como a un duro.
Nooo... Los que me conocen de verdad saben que soy un trozo de pan.

El pan puede ser más o menos bueno y llevar hecho más o menos días.
¿Me ha llamado para preguntar o para hacer filosofía barata sobre el pan?

Vamos a ello. Por partes: inmigración.
No podemos mantener a todos los muertos de hambre del mundo.

Usted es hijo de un catalán y de una suiza italiana.
Pero yo no soy un muerto de hambre.

O sea, que se trata de deshacerse de los pobres.
Pero sólo de los pobres de fuera; a los pobres franceses nos los quedamos.

Sólo faltaría.
Sí. Es que no hemos encontrado ningún país que acepte que los deportemos allí.

Qué raro, ¿no?
Sí, porque no son extranjeros, son franceses.

En los demás países son extranjeros.
No diga tonterías: los franceses siempre son franceses, no extranjeros.

Dejémoslo aquí. Se hizo muy famoso el caso de la niña kosovar a la que bajaron del autobús escolar para deportarla.
Mucho melodrama es lo que hay. Era gitana y no tenía papeles, no sé qué más hay que añadir.

Los rumanos que está expulsando son ciudadanos europeos y sí tienen papeles.
Pero son rumanos, hombre.

Gran explicación.
¿Verdad que sí?

Cambiemos de tercio. Parece ser que, económicamente, no van a tener más remedio que aplicar las recetas europeas.
Sí. ¿Y?

Nada. Que, como ya hemos visto con España o Grecia, son políticas de derechas que pagan los ciudadanos y usted se supone que representa otra cosa.
Usted supone mucho, me parece a mí.

¿Sabe usted quién es Bono?
Claro: el cantante de U2.

No, el Bono de España.
¿Ese señor al que le crece el pelo milagrosamente?

Ese mismo. Es que me recuerda usted a él.
Qué tontería. Yo tengo un pelo fuerte, hermoso y normal.

No, es que cada vez que le oigo pienso que, por lo que sea, se equivocó de partido. Parecen ustedes dos cualquier cosa menos socialistas.
¡Retírelo! ¡Soy más socialista que Groucho Marx!

Ése era el actor, Sr. Valls.
Bueno, pues cómo se llamara el otro. ¡Soy socialista a tope!

En todo caso parece que lo de Libertad, Igualdad y Fraternidad se está desvirtuando un poco.
Yo lo veo totalmente actual. Tratamos con la misma igualdad a los rumanos que a los búlgaros, fomentamos la fraternidad entre franceses mientras no se entremezclen las clases sociales y, sobre todo, tengo toda la libertad del mundo para hacer lo que me dé la gana.

No sé si es a ese tipo de libertad a la que se referían los de la Revolución, la verdad.
Usted no es francés, qué va a saber.

Bueno, pues nada: suerte, Sr. Valls.
Suerte a usted, que se dedica a juntar letras. Yo soy primer ministro de Francia.

Hasta luego.
Adiós.

Para bien o para mal, el socialismo ya no es lo que era, indudablemente.

 

LeandroAguirre©2014

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