Hola… ¿El Juntaletras?
Sí. ¿Quién es?

El Juntaletras.
Venga, hombre, no me jodas; el Juntaletras soy yo.

Ya. Y yo. ¿Puedo hacerte unas preguntas?
¿Estamos hablando de entrevistarme a mí mismo? Va a quedar un poco raro, ¿no? Por no decir que va a quedar como un caso claro de doble personalidad.

No es doble personalidad. En todo caso, una sola personalidad desdoblada.
No sé que es peor, la verdad.

¿Importa?
Pues la verdad es que a estas alturas de la película ya no.

¿Empezamos?
Dispara.

¿Qué se siente después de diez años juntando letras para nada?
No sé, dímelo tú, que eres yo.

Se trata de que respondas tú.
Pues me siento un gilipollas, para qué te voy a engañar si eres yo.

¿Y por qué sigues?
Ya te lo he dicho: porque soy gilipollas. Porque eres gilipollas, vamos.

¿Y no has pensado en parar?
Continuamente.

¿Y por qué no lo haces?
Porque sería admitir que he tirado diez años de mi vida siendo un gilipollas.

Ya, pero es que eres un gilipollas.
Tú también, no lo olvides.

Bueno, pero yo soy el que pregunta y tú el que respondes, así que el marrón te lo comes tú.
¡Que somos la misma persona, gilipollas!

En todo caso, los diez años ya no los vas a recuperar. Ese barco ya zarpó, no sé si es necesario seguir perdiendo el tiempo.
Eso mismo me digo yo. Bueno, eso mismo me dices tú. Joder, qué lío.

¿Y ahora qué, Juntaletras?
Pues no lo sé, Juntaletras. De momento aquí celebrando el 10º aniversario.

No sé qué coño hemos de celebrar.
Llámale celebrar, llámale conmemorar, llámale hurgar en la herida…

¿Alguna idea?
De momento voy a regalar el e-book de Especies Humanas unos días.

¿Más cosas gratis? Realmente eres gilipollas.
Oye, que también es idea tuya.

Repito: yo pregunto y tú te comes el marrón.
¿Y si cambiamos?

Vale. Va, pregunta.

¿Por qué eres tan gilipollas, Juntaletras?
No lo sé… Por lo mismo que tú eres igualmente un gilipollas, supongo.

No sé si vamos a llegar a ningún lado así.
Bueno, igual conseguimos que nos ingresen en un psiquiátrico.

Pues qué bien, ¿no?
Piénsalo, igual no es tan malo: nos darían de comer, tendríamos un lugar donde dormir, no tendríamos que juntar letras nunca más…

¿Por qué hablas en plural? Solo somos una persona.
¿Seguro?

Yo qué sé, ya empiezo a dudarlo.
¿Acabamos ya con esto?

Por favor.
Ahora eres tú el que está preguntando, finalizar es tu trabajo.

Pues va, venga, se acabó.
Has hecho finales de Entrebestias mejores.

Y tú también, majo.
Ya, pero es que ahora te toca a ti.

Pues nada, adiós, gilipollas.
Hasta otra, gilipollas.

¡Que somos el mismo, gilipollas! No te vas a ningún lado.
Ya lo sé. Ya te gustaría.

Además de verdad. Venga, dejémoslo.
Mejor, sí.

Esto va a acabar mu’ malamente, ya verás.