PROTAGONISTAS: Lopera y Cuervas.

ÉPOCA: Una cutre, pero entretenida.

MOMENTAZO: Los presidentes de clubes de fútbol siempre han tenido, en general, una pedrada bastante importante en la cabeza. Deben venir así de serie, no sé. Pero es que hubo una época en España, los ’80 y ’90 concretamente, que aquello era un festival para el que no hay palabras. Sin ir más lejos, por esta sección ya han pasado Gil y Caneda, que llegaron a las manos —bueno, Gil llegó a las manos— un buen día que les sentó mal el desayuno, y Ruiz Mateos, que otro buen día le arreó un puñetazo al entonces ministro Miguel Boyer.
Los protagonistas de hoy, los presidentes entonces de Sevilla y Betis, Luis Cuervas y el inimitable Manuel Ruiz de Lopera, no llegaron, que se sepa, a las manos, pero dejaron para la posteridad este memorable momentazo:

 

Pero no se vayan todavía, que aún hay más:

 

En fin... En bares de polígono he visto yo discusiones con más clase, en serio. También es cierto que eso sucedió antes de que intentaran convertir el fútbol en la ópera, pero ni tanto ni tan calvo, oye. Qué cosa...